domingo, 30 de julio de 2017

Bodegón


Este dibujo fue realizado sobre papel de estraza de color gris.

Me gusta mucho este papel para trabajar con  témperas o gouache porque presenta una textura ligeramente áspera, mate y muy absorbente que te permite acabados planos como los que yo buscaba.

Lo he titulado "bodegón" porque el motivo que me lo inspiró fue un conjunto de  botellas y jarrones sobre una mesa.

Persigue un juego de contrastes vivos en una composición circular en la que todo gira en torno a un núcleo central

martes, 18 de julio de 2017

Paraguas en un rincón

Paraguas en un rincón (Óleo sobre lienzo)

Hace muchos días que no subo nada al blog pero no creáis que ha sido por falta de cosas que mostraros, lo que ocurre es que ¡cómo se me pasa el tiempo! sobre todo ahora, con días largos y hermosos para pasarlos fuera disfrutando del campo, el mar, el sol y ¿por qué no? de la lluvia.
Estos paraguas pertenecen a mi época más rabiosamente "fauvista" y se les nota ¿verdad?

El fauvismo (de "fauve", fiera) fue un movimiento artístico francés que se desarrolló a principios del siglo XX y cuyo representante más conocido fue Henri Matisse cuya obra adoro y al que dedicaré algún día una entrada en exclusiva.

Este movimiento se caracteriza fundamentalmente por el uso del color que se convierte en el protagonista indiscutible de la obra pictórica pasando los demás aspectos a un plano secundario.

Los fauvistas prescindieron del claroscuro, la perspectiva... e intentaron con solo el color conseguir profundidad, volumen, etc... y lo utilizaron muy vivo y plano, buscando con él contrastes armoniosos pero muy fuertes. Contrastes que transmitieran sentimientos y emociones.

Para mi, lo más importante fue esto: que consiguieron desligar el color de la realidad: un sol no tenía por que pintarse amarillo, podía ser verde o de otro color en función de la expresión, el sentimiento y la composición buscadas por el autor.

lunes, 3 de julio de 2017

Interior con botella


Al principio, aunque cueste trabajo creerlo, fue un dibujo realista: una estantería con libros y carpetas en el estudio, una botella encima de la mesa...

La luz entraba a raudales por la ventana y empecé a marcar sobre el dibujo, las sombras que formaba  en la pared, en los muebles, en el suelo...

Luego comencé a simplificar, a eliminar lo que sobraba en la composición, a limpiarla de líneas discordantes o innecesarias y al final, quedó lo que veis que a mi personalmente me satisface bastante y con eso me conformo.

Prácticamente todo el cuadro está trabajado con "reservas" (ya hablé en una entrada anterior sobre esta técnica) que dio como resultado un cuadro muy geométrico, con líneas muy marcadas, al estilo constructivista.


Para hacer la reserva utilizo, como se ve en la foto, tiras de papel adhesivo. La pintura sobre la que se aplica, tiene que estar seca y lo mejor es arrancar la tira nada más depositar el nuevo color.

Para neutralizar la frialdad que podría comunicar tanta línea recta, utilicé una gama de colores cálida y suave con predominio de amarillos y naranjas muy matizados y algo de azul como complementario para crear contraste.

Está  pintado con óleos sobre lienzo.